miércoles, 16 de diciembre de 2009

El cazador de dragones

Cuando no hace mucho Azote me comentaba la incertidumbre que se cebaba en una amiga a la hora de hacer un regalo a su pareja ya que, según parece, es bastante aficionado a la mitología nórdica, le preparé una breve relación de títulos entre los que se contaban las Eddas Mayor y Menor, editadas por Alianza, y algunos de los libros que Miraguano publica dentro de la colección Libros de los malos tiempos. Además de estas obras, incluía una que, sin dudarlo, merece compartir con aquellas un lugar en el corazón de todo amante de estas culturas: La leyenda de Sigurd y Gudrún, la última obra editada de J.R.R. Tolkien, que ha visto la luz hace ahora apenas dos meses a través de Minotauro.

De esta obra en verso que Minotauro nos trae en edición bilingüe se ha dicho prácticamente de todo. Desde la expectación generada tras la noticia de que un manuscrito del genial filólogo inglés había aparecido en algún polvoriento cajón cuando su hijo Christopher hurgaba entre papeles, viejos marcapáginas y antiguas fotos; del heredero se ha dicho que hizo suyo aquello de "vive de tus padres hasta que puedas hacerlo de tus hijos”, pero también que gracias a su labor hoy día han salido a la luz gran cantidad de obras que Tolkien (bastante más prolífico de lo que creen quienes únicamente se han acercado a él a través del cine, y de sus tres obras más conocidas: El Silmarillion, El Hobbit y, por supuesto, El Señor de los Anillos). Sea como fuere, lo cierto es que su labor recopilando los textos del querido profesor, estudiándolos y presentándolos de una forma adecuada para que el lector interesado pueda descubrirlos y disfrutarlos ha sido a lo largo de los años el verdadero motor que nos ha acercado a Tolkien.
Ye need not to knock,
for known your coming!
The greetings is prepared -
the gallows waits you.
The hungry eagle,
the hoary wolf,
the ravens are ready
to rend your flesh!
En La Leyenda de Sigurd y Gudrún, Tolkien nos deleita con unos poemas épicos que retoman la tradición mitológica nórdica que tanto influyera al resto de su obra. La saga de los Nibelungos, que también inspirase la tetralogía operística de Wagner, pues bebió de las mismas fuentes que nuestro autor, marca el origen para una obra en la que Tolkien nos desvela lo acontecido entre Sigurd y la valkiria Brynhild, las aventuras del primero enfrentándose al cruel dragón Fáfnir y arrebatándole un tesoro que defendía tan fieramente como Smaug en El Hobbit, extendiendo la historia original presente en numerosas eddas pero sin incluir los “aditivos” que caracterizan a la de Wagner.

No se trata, como se han empeñado en afirmar, de una obra que sea del gusto del lector medio de Tolkien. Sí, en cambio, deleitará a aquellos lectores a los que les guste descubrir algunas de las fuentes de las que bebió el autor a la hora de imaginar el maravilloso mundo de Arda y algunos de los hechos que allí acontecieron. También gustará, como apuntaba al comienzo, a aquellas personas interesadas en la mitología nórdica. Pero, sobre todo, encantará a aquellos que sepan descubrir entre sus páginas toda la magia que contienen las historias bien narradas, las leyendas épicas intemporales y la pluma de un gran escritor.
Las cascadas de Andvari
rebullían y brotaban
rebosantes de peces
en los espumosos estanques.
Allí se entretenía Otr,
mi propio hermano,
capturando salmones
que dulces le parecían.
Feliz lectura.

12 comentarios:

Unknown dijo...

Hola!!

Nos hemos dado cuenta de que te tenemos en nuestros afiliados, te gustaría afiliarnos??? Nosotros te seguimos también :)

Muy buena entrada!

BesitoS!

Homo libris dijo...

¡Buenas! Ya os agregué (de hecho, os tenía pendientes para el momento en que actualizase los enlaces, pero en fin, lo he adelantado un poco).

Saludos.

Iraya Martín dijo...

No dudo de la calidad del libro, aun pensando lo que pienso de Christopher y estoy de acuerdo contigo en que no es un libro para el lector medio de Tolkien. Yo lo que verdaderamente me pregunto sobre estas obras es ¿las hubiera Tolkien presentado de este modo? Con toda probabilidad si pues es un estudio y un trabajo que muchísima gente aprecia pero a veces tengo la sensación de que el maestro las hubiera presentado de forma más amena que el hijo. Vamos es un pensar muy mío este :P

Por cierto, a ver cuando le echo la zarpa al libro y la hojeo porque la edición tiene una pinta cuidadísima.

La Belle Dame Sans Merci dijo...

¿Casualidad? Acabo de empezar su lectura hoy mismo y ya estoy completamente maravillada. ^^
La verdad es que coincido contigo en que no es un libro que guste a la gente que anda buscando más aventuras sobre la Tierra Media. Por contra, a los que amamos la literatura nórdica, es como para ponernos una palangana debajo. :)

Respecto a lo que dice Elwen, estoy de acuerdo en que muchas cosas Tolkien no las hubiera publicado de la manera en la que han sido publicadas. Y de lo que estoy convencida es de que, por lo menos, Tolkien hubiera puesto el grito en el cielo por ver El Silmarillion editado así. Y amenidad la suya, poca. ;)
Pero, a pesar de todos los peros que siempre le pongo a Christopher, yo me pregunto: si nosotros fuésemos filólogos, hubiésemos sido miembros oficiales de los Inklings y nuestro padre hubiese sido Tolkien, ¿acaso no hubiéramos dedicado nuestra vida profesional a estudiar y editar libros sobre el legado de nuestro padre? Uf, en el caso de Christopher, siempre me debato entre dos aguas. ^^

¡Un saludo!

Isi dijo...

Yo si fuera Chistopher haría exactamente lo mismo.

En cuanto al libro, yo sé que a mí no me va a gustar, pero me alegro que los súperfans de Tolkien no tengáis vetado el disfrute de nuevas obras del autor por un hecho tan insignificante como su muerte... ;)

La Belle Dame Sans Merci dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
La Belle Dame Sans Merci dijo...

El problema, Isi, que tiene Christopher Tolkien es que es denso de narices en sus explicaciones. Pero ocurre mucho cuando se trata de libros de crítica literaria. Cuando de adolescente empecé a leer Historia de la Tierra Media, casi me da algo con las notas de "a este fragmento de la historia tal que mi padre escribió en una cuartilla a lápiz en el año 33 lo llamaré A, mientras que el fragmento que años más tarde redactó a tinta y que contiene diversas alteraciones de la historia, lo llamaremos B. Otro tercer documento..." ¡Ja, ja, ja! XD De ahí mi comentario y el de Elwen respecto a lo de la amenidad. ;)

Si tengo que ser sincera, cuando viene alguien a la librería para preguntarme por libros de Tolkien para regalar, me preocupo muy mucho por enterarme de los gustos de la persona y, si se busca un libro sobre la obra de Tolkien, admito que siempre aconsejo los de Tom Shippey, Eduardo Segura o Joseph Pearce antes que los de Christopher, porque su lectura es mucho más amena. Bueno, a quién pretendo engañar: siempre recomiendo a Tom Shippey y a Eduardo. Y las biografías de Carpenter sobre Tolkien y sobre Los Inklings, que son a mi entender imprescindibles. XD Pero es evidente que el trabajo de Christopher ha ayudado mucho a estos grandes autores. De todas maneras, en los últimos años, también el buen anciano (ya tiene una edad) ha intentado "reducir" sus explicaciones y mostrar los textos tal cual. :)
¡Un saludo!

P.D.: Sí, he visto una errata en mi contestación, por eso la he borrado antes, ¡ja, ja, ja! (Para evitar "azotes" XD).

Isi dijo...

jope Alienor, si es que me parto contigo. No sabía que Christopher es tan denso, porque no he leído nada suyo, obviamente.
por cierto, te contaré algo en tu blog que me hizo pensar en ti

Homo libris dijo...

Elwen, me consta tu opinión sobre Christopher. Ya ves que, aun salvándole en lo que respecta a que nos ofrece la posibilidad de acceder a los textos de su padre y a lo interesante –aunque en ocasiones peñazo- de sus intervenciones, también creo que ha explotado en lo posible el éxito de los libros de J.R.R. Tolkien. En fin, por mí que siga con ello en tanto nos presenten más y más textos de mi adorado autor, jejejeje.
Por otro lado, pienso exactamente como tú: muchos de los textos que presenta Christopher a buen seguro habrían sido publicados por Tolkien de otro modo y, además, posiblemente otros no verían jamás la luz, por tratarse de meros intentos de organizar sus ideas… Pero en fin, lo que está claro es que vemos las entrañas de la escritura de Tolkien con todo esto.

Alienor, ¡qué casualidad! Me alegra que lo hayas comenzado y te esté gustando (no podía ser de otro modo, jajaja). En efecto, el libro va más allá de la órbita gravitacional tolkiendili para instalarse en un libro de referencia para quienes amamos o son simples aficionados a la cultura y mitología nórdicas. A ver qué te parece cuando lo termines, ¡ya nos contarás! ;)
En cuanto a los ensayos y autores con que respondes a la intervención de Isi, estoy totalmente de acuerdo contigo. Eso sí, sumaría las Cartas de Tolkien, que constituyen uno de los documentos (o más bien, una recopilación de los mismos) más interesantes para cualquier seguidor de la obra del querido profesor.

Isi, ¿cómo que lo mismo? ¿No ofrecerías la obra de tu padre bajo licencia Creative Commons para beneficio de toda la Humanidad? ;) Bueno, respecto a que no te gustaría el libro, nunca digas nunca jamás (si no, recuerda ese Tristram Shandy que nos trajo de cabeza unos meses, jejeje). Con lo de la “insignificancia” del hecho de su muerte me he tronchado. :D

¡Un abrazo!

La Belle Dame Sans Merci dijo...

Lo de las Cartas es un olvido imperdonable, sí. ¡Me fustigaré cien veces! XD Pues que sepas que cuando recomiendo a Shippey les hago la puñeta a los clientes, porque sus dos libros están descatalogados... Así que les remito a iberlibro. ^^ Pero, como suelo decir, es que Tom Shippey es Dios y bien vale la pena intentar conseguir esas dos maravillas. Hace un par de años los de la delegación de Barcelona de la STE casi lo consiguen traer para su curso anual sobre Tolkien en la universidad autónoma de Barcelona, creo que es, y casi me da algo. Al final no pudo asistir, pero si llega a venir voy a Barna andando si es caso. ¡Ah, y Eduardo Segura cenando con él y todo! ;)
Resumiendo: ¡Gran Shippey!¡Y mira que Tolkien le sacó erores en su Camino a la Tierra Media! Si es que el profesor era, como se dice en mi pueblo, un cutico gruñón. ^^
¡Un abrazo!

Último Íbero dijo...

Pues aún no me ha comprado este nuevo libro de Tolkien porque lo cierto es que mi penetración en el mundo de las sagas nórdicas es más bien escasa. Bueno, el Beowulf lo tengo trillado porque en cierta ocasión, que jamás volverán a contemplar los siglos, fui honrado con la posibilidad de citar de manera teatral una parte de tan magna obra.

Y poco más.

Aunque reconozco que leyendo lo que decís le voy a dar una oportunidad a esta obra. Además, con el paso de los años le estoy dando un valor creciente a las dotes poéticas de Tolkien.

Una consulta ¿qué edición me recomendáis para leer y descubrir plenamente la Saga de los Nibelungos?

@scen dijo...

Después de leer "El Señor de los Anillos" y "El hobbit" (en este orden) mi entusiasmo me hizo volcarme sobre "El Silmarilion".
Sin comentarios.
No me atrevo a aventurarme con mas tolkiens. Si acaso, y si algún día me hago con él, leeré "Cartas de Papá Nöel", pues por lo que he leído sobre este libro, creo que me gustará.
Besos.