Llevo unos pocos días utilizando el lector de libros electrónicos Papyre (la versión española del Hanlin V3), y de momento la sensación general que me transmite el aparato es bastante buena. En unos días os comentaré un poco más acerca del eReader, pero hoy quería llevar a cabo una reflexión acerca de las implicaciones que podría tener sobre el mercado editorial la proliferación de estos artilugios, que sin duda alguna irán incrementando su presencia en los hogares a corto o medio plazo.
Mi interés se centró en estos dispositivos hace algunos años, cuando aún parecían un invento de la ciencia ficción que tardaría mucho tiempo en materializarse. Por mi profesión, la informática, he de utilizar muchos libros “perecederos”, libros técnicos que usualmente no son traducidos al castellano y que pueden tener una vida útil de 4 ó 5 años, convirtiéndose en meros objetos para curiosos pasado este tiempo. Los que adquiría iban acumulando polvo en las baldas de mis estanterías, o debía leerlos en formato PDF o CHM en la pantalla del ordenador o en la PDA, con el consiguiente deterioro de mis queridos ojos, por lo que se me antojaba interesante que aparecieran pronto estos dispositivos. Aunque los lectores electrónicos actuales aún no están preparados aún para facilitar la lectura de este tipo de libros, con gran cantidad de gráficas y diagramas, hipervínculos, diferentes tipografías y numerosas secciones y notas de página, me seguían llamando la atención, ya que sabía que podría sacarle partido a uno de ellos, utilizándolo como alternativa a la biblioteca pública, ya que por motivos de trabajo en el último par de años me resultaba bastante gravoso ir a la biblioteca pública, que siempre fue una de mis fuentes preferidas, y últimamente compraba todos los libros que leía.
A lo que iba, que me pierdo en un mar de divagaciones; en los últimos tiempos han comenzado a surgir voces, principalmente provenientes de editoriales y políticos, que claman al cielo su preocupación por el impacto que puede tener la piratería en el mercado del libro. No se preocupan, no, del alto precio de los libros en España, que pueden venir a costar de media 20€ en las primeras ediciones, en tapa dura o incluso rústica, y unos 10€ las de bolsillo, que suelen salir al mercado al año de haber sido editadas las anteriores. Se trata de un mercado intervenido para asegurar la producción y que no haya competencia desleal entre distribuidoras, algo interesante para los pequeños comercios (y que conste que para nada me gustaría que se impusiesen efnacs , corteingleses y centros comerciales varios sobre las librerías de toda la vida) pero que termina siendo un pesado lastre para los lectores, que debemos desembolsar una importante cantidad de dinero a la hora de adquirir un libro cuyo coste de edición, posiblemente, sea bastante inferior. Por si fuera poco, leer un libro de cualquiera de nuestras bibliotecas públicas tampoco es gratis, al determinarse la aplicación de un canon que grava los libros que son sacados de aquellas para la compensación del ¿autor? y que al no recaer directamente sobre los usuarios, la compensación parte de las arcas públicas, es decir, del bolsillo de todos los ciudadanos. En resumen, que las editoriales están siendo sobreprotegidas por los distintos gobiernos que han ido pasando por este país, y para leer hay que pagar sí o sí.
Y ahora surge un nuevo enemigo (¿para la cultura o para el oligopolio?), lectores electrónicos que hacen más cómoda la lectura de textos en formato electrónico y que, en combinación con Internet, deberían suponer un acicate que instase a las editoriales a superarse, y que en cambio ven peligrar en ellos la onerosa hegemonía que ostentan desde tiempos inmemoriales. No se plantean las ventajas que puede reportarles este nuevo modelo de negocio, como tampoco lo hace una Ministra de Cultura que bien podría hacer honor a su cargo, y culturizarse un poco, ya que según ella resulta asustante que los libros circulen por Internet. Resulta también llamativo que una de las mayores ferias del libro, la de la capital del reino, no acoja ninguna representación de esta nueva forma de leer. El problema de estos señores es que no quieren ver que este nuevo modelo no supone un hándicap, sino una oportunidad. El libro electrónico no tiene que suponer la muerte del libro tradicional, pero sí podrá contribuir a una democratización del proceso de elección de nuestras lecturas.
Por mi parte, seguiré comprando libros, aunque los lea previamente en mi Papyre. El lector electrónico será mi biblioteca pública más cercana, no un impedimento para que compre los libros que desee tener. Obviamente no voy a comprar el bestseller de turno, que únicamente me interese para pasar el rato leyendo en la playa, pero sí un libro que me guste releer y conservar. Por el primero estaré dispuesto a pagar una cantidad justa por su consumo, que repercutirá sobre el autor en un grado mayor de lo que lo hace actualmente, donde son los intermediarios quienes se llevan el máximo beneficio; el segundo lo compraré en papel, porque sigue pareciéndome la mejor opción para disfrutar de todo el placer de la lectura y de la pasión bibliófila.
Por mi parte, seguiré comprando libros, aunque los lea previamente en mi Papyre. El lector electrónico será mi biblioteca pública más cercana, no un impedimento para que compre los libros que desee tener. Obviamente no voy a comprar el bestseller de turno, que únicamente me interese para pasar el rato leyendo en la playa, pero sí un libro que me guste releer y conservar. Por el primero estaré dispuesto a pagar una cantidad justa por su consumo, que repercutirá sobre el autor en un grado mayor de lo que lo hace actualmente, donde son los intermediarios quienes se llevan el máximo beneficio; el segundo lo compraré en papel, porque sigue pareciéndome la mejor opción para disfrutar de todo el placer de la lectura y de la pasión bibliófila.
Por todo esto, creo que los libros electrónicos no sustituirán a los tradicionales, sino que los complementarán. Aportarán la posibilidad de leer libros de forma imperecedera, eludiendo caprichos editoriales que descatalogan libros maravillosos que se tornan en imposibles de encontrar, por sepultarnos en una vorágine de nuevas publicaciones. Permitirán leer sin preocuparse por la fecha de caducidad de libros que podremos conseguir desde casa, a través de Internet, y nos aportarán la garantía de adquirir al fin, en formato tradicional, aquellos que queramos conservar o regalar.
Ahora bien, si las editoriales no aprenden la lección inherente al varapalo sufrido por la industria musical (que aun así, podría asimilar mucho más fácilmente el cambio de modelo comercial), perderán irremisiblemente esta oportunidad de negocio. Y no podrán decir que no se les avisó.
18 comentarios:
Hola, Mithdraug, ¡qué entrada más interesante!. Precisamente sobre los e-books, su implantación y si sustituirán o no al libro tradicional discutí y supongo que discutiré con Ismael (también él es informático).
Como aún no he visto ninguno "en persona", no puedo opinar. No se que libros podrán descargarse o no. Mi impresión es que para libros técnicos y de consulta en general, ganarán por goleada. Yo que soy una adicta a los diccionarios, desde que puedo consultar el de la RAE en el ordenador (ahora añadieron el de dudas) tengo a los "tradicionales" abandonados.
Respecto a lo que dices de las bibliotecas -porque todo va unido-;no me importaría pagar una cuota,alquiler o como quieran llamarlo si esa cantidad fuera para la compra de libros, pero va al bolsillo de la SGAE. (no les dedico una entrada porque no quiero verme llevada a juicio pero...) y otro tema que planteas, también muy interesante, es el de la INDUSTRIA EDITORIAL. Ahora es todo una gran empresa (o dos) que se dedican a publicar lo que se vende bien, aunque sea una M que se merezca que "tiremos de la cadena". Aún existen pequeñas editoriales o algunas no tan pequeñas que hacen un trabajo de calidad.
Me parece que voy a leer "a Galaxia Gutemberg" lleva siglos en mi estantería esperando su momento y creo que ya le ha llegado.
hola!
Muy interesante tu entrada, pues es algo de lo que yo ando pendiente. No tengo ereader pero vamos, pienso tenerlo como sustituto de los libros, aunque también creo que, si regalas un libro, será un libro físico, de manera que ambos estarán en el mercado.
Pasa con la música: hay CDs, pero también está itunes. Ahora claro, el precio de un libro no puede ser de 20 euros, porque se los comerán con patatas.
POr cierto, lo que cuentas de las bibliotecas (que he leído en el enlace también) me parece alucinante; nunca había reparado en ello; y pensar que mucha gente no conocería ciertos autores si no fuera a través de la biblioteca.. ¡el favor se lo hacemos a ellos!
En conclusión ¡que estoy deseando tener un ereader!
Buenas noches. Si te apetece leer un libro de relatos breves yo ofrezco la descarga gratuita del mío en un PDF perfectamente maquetado (y testado) para el Papyre. Te lo puedes descargar aquí:
http://www.guiadeconcursos.com/Lavigaenmiojo/?page_id=230
Eso sí, te lo lees agradecería algún tipo de comentario en el blog.
Un saludo
Javi de Ríos
Lammermoor, creo que te gustará la experiencia de la lectura en un lector electrónico. De todas formas, cuando me refería a que aún no estaban preparados para la lectura de libros técnicos (al menos en los formatos habituales de PDF y CHM) era, por un lado, por los motivos que expongo en la entrada, y por otro, porque (al menos es lo que ocurre con el Papyre) no facilitan la búsqueda de términos dentro de los documentos. Imagino que los lectores más potentes (Kindle, iLiad y similares) sí que podrán hacerlo. Entre lo poquito que echo en falta de mi lector está la posibilidad de tomar notas, y la inclusión precisamente de diccionarios y traductores (para facilitar la lectura de textos literarios en inglés u otros idiomas).
Sobre las bibliotecas, que es otro tema, pero como bien dices muy cercano, personalmente pienso que no se debería pagar por ellas. No me importaría, como a ti, tener que hacerlo, pero considero que el acceso libre a la cultura y la información para toda la población, independientemente de su poder adquisitivo o nivel social es fundamental. No se le deberían poner puertas al campo, ni a las bibliotecas o a Internet; si ya se lee poco en el país, menos lo harían en ese caso. Como apunta Isi, muchos autores no llegarían a conocerse sin que alguien los leyese, un buen día, y con el boca a boca los recomendase. Imaginad que leéis un libro en la biblioteca (o, ahora, en el lector electrónico) y os gusta. Podréis comprarlo para tenerlo en casa, o puede pareceros un buen regalo para un amigo. Por esto digo que ni las bibliotecas fueron un problema para el mercado del libro, ni ahora lo serán estos dispositivos. Ahora bien, el mercadeo despiadado y descarado de las editoriales sí que puede llevar al traste con todo lo que ansían obtener. Lo que es cierto es que el libro electrónico no podrá valer 20€, como apunta Isi, ni 8 ó 10 como dicen los medios. Para 8€, sinceramente, me compro el de bolsillo. Creo que el intervalo 2-5€ puede ser justo, teniendo en cuenta que la producción se abarata considerablemente, y que los únicos gastos serían los del propio autor/traductor, los de un revisor y los de la edición del texto, sumados al hosting, que no es demasiado caro estos días. Pero a ver por dónde nos salen :)
Javier, tomo nota de tu texto, que veo que está disponible para su impresión bajo demanda, y en PDF para su lectura en ordenadores y con el Papyre. No dudes que te haré saber mi parecer al respecto. Gracias por tu recomendación, que a buen seguro será bien recibida por el resto de lectores del blog. Por cierto, tomo nota del tuyo ;)
Saludos.
Podríamos debatir este tema durante horas y no nos cansaríamos. Pero tampoco solucionaríamos el mundo editorial.
Me quito el sombrero ante tu post y estoy totalmente de acuerdo contigo. Pero además añado un apunte, ¿has probado a COMPRAR un ebook?. A mi me parece un escándalo pagar 10 euros (o más) por un libro electrónico. Sin mencionar que conseguirlos "de pago" es casi imposible.
Uno intenta ser legal pero no lo dejan xDDDD
P.D. Al final me voy a quedar sin ejemplar de Geralt firmado buaaaaaahhh :,,,,,(
Cierto, que expresemos aquí nuestra opinión de poco nos va a servir, si no hacemos ver al resto de la población que, entre otras cosas, en muchos casos se vulneran los derechos civiles. Se quiere separar Internet, y los "derechos digitales" de la vida real, como si fuese posible a día de hoy tal cosa.
En cuanto a "comprar" un libro digital, ¡pues claro! ¿Cómo si no conseguirlo? Recuerda que la piratería es mala, malísima, como la circulación de libros por lar red :) Ya en serio, me parece abusivo que un libro digital cueste 8 ó 10 dólares, y otro tanto que los libros electrónicos (como tantos otros productos) se comercialicen, pongamos, a 300$ y aquí valgan 300€. Que digo yo que el cambio de divisas estará para algo... pero no.
En fin, que como no cambien las cosas, creo que algunos lo van a pasar mal. Y no tienen por qué ser (no deberían serlo) los autores.
En cuanto a lo de Sapkowski... ¿qué me dices? ¿No va finalmente tu amigo a Madrid en esas fechas? ¿Y tú, no viajabas a Madrid en verano con tu pareja? (eso me pareció leer en tu blog, o en algún sitio, no hace mucho). Yo estoy pendiente de ver si puedo ir ese fin de semana, pero si es así, da por seguro que estaré unas cuantas horas en la cola esperando estrechar la mano del gran Sapko, y donde se firman dos, se firman tres, ¿no? :)
Saludos.
Al propósito de la piratería, hablaban en no sé qué programa de radio, y en entrevistado explicaba el tema con un ejemplo: todos tenemos agua que sale del grifo "gratis", pero aún así hay gente que compra botellas y hay empresas que viven de vender agua. Pues lo mismo; tendrán que utilizar otro método de venta, bajar precios, ofrecer algo más que no tengamos de otra manera...
Se refería, por supuesto, a la música, pero es aplicable en general, creo yo.
Sí, la verdad es que lo veo un buen ejemplo: la oportunidad está ahí, sólo hay que saber aprovecharla, hacer ver a la gente que es apetecible y que les aporta algo respecto a lo "gratis".
Curiosamente, hoy en las noticias la la televisión pública aparecía el inicio de la Feria del Libro de Madrid. Mientras que las declaraciones del otro día apuntaban a que no se habían recibido solicitudes para participar de parte de las empresas vinculadas al sector del libro electrónico, en televisión se decía Papyre en mano, que aunque son la actual revolución, no se venderían en la feria "porque las reglas de la misma lo prohíben"... Curiosa contradicción, ¿no es cierto?
NO ME LO PUEDO CREER
Es que hay que ser. Joer, que por lo menos piensen en el amazonas, que no sé si quedará algo con tanto papel que se malgasta.
Por cierto, y lo he pensado ahora: ¿habéis pensado en la ventaja que supondría para los estudiantes? Imagino a los niños yendo al cole con mochilas que no les partan la espalda porque sólo tienen que llevar cuatro cuadernos (no cuatro cuadernos y cuatro libros), y el ahorro de los padres el mes de "la vuelta al cole" (si asumimos que los e-libros no costarán lo mismo que los libros normales).
Se me acaba de ocurrir, pero me parece interesante. En fin, que da para mucho, como dice Elwen.
PD: no escribo nada en la entrada de arriba porque no escucho ni conozco ni la mitad de la música que has comentado.
Sí, es para ni pensarlo... porque me indigno.
Respecto a los niños, sí que lo había pensado. Cuando me expresaba escéptico respecto al tema de la subvención para compra de ordenadores en los colegios, por supuesto no incluía a los lectores de libros electrónicos, que sí me parecen bastante interesantes a la hora de leer libros, incluso los de texto. La única pega que les veo por ahora a los eReaders es la dificultad para buscar una determinada información (el Papyre al menos no incluye búsqueda de palabras), y la lentitud del refresco de pantalla. Pero serían una interesante opción de cara al futuro y, como dices, los libros resultarían (o deberían resultar) más asequibles.
En cuanto a la entrada musical, mucho me temo que ha tenido poco éxito, jajajaja. En todo caso, ¿qué música escucháis habitualmente? Lammermoor sí que nos deja en su blog alguna referencia musical, pero ¿y los demás?
Saludos.
Para mi sería fantástico que pudiera tener los libros de la universidad en el Papyre, todos sabéis lo gordotes que son. El problema en eso, como apuntó Mithdraug, son los gráficos. Precisamente esta semana intentaba pasar mis propios apuntes al lector y con los esquemas y tablas la cosa es harto imposible. Creo que para ese caso si que conviene un lector tamaño A4.
En cuanto a lo de la Feria... estaré en madrid en Julio :(. El amigo que iba a ir hubiera estado encantado pero los exámenes no lo están dejando ni respirar. Que le vamos a hacer, algún día será ^^
En efecto, Elwen, yo también lo estoy intentando con algunos libros técnicos, y mejor ni hablar. Creo que para la novela, el cuento y la poesía, puede estar muy bien nuestro lector, o uno cuya pantalla alcanzase el A5. Para los demás, y habida cuenta de que existe un amplio catálogo de PDFs ya formateados para ser impresos en A4, un lector de gran tamaño sería lo ideal.
Pero bueno, tiempo al tiempo, ya irán bajando de precio e incrementando sus prestaciones ;)
Sobre Madrid, yo quería visitar a un amigo en verano, pero con lo de Sapkowski voy a intentar que sea pronto para ver a este hombre. Si no pudiera ser, barajábamos la posibilidad de ir en Julio o Agosto, cuando Madrid duerme el sueño de los justos y está realmente tranquilo.
Ahora bien, si coincidimos, habrá que hacer alguna incursión librera :)
Saludos, y buen fin de semana.
Bueno, te contesto al tema musical.
Te digo algo de lo que escucho y, si te gusta, de digo más grupos y artistas, porque no sé si conocerás esta música.
Mira; entra en http://www.lastfm.es/home
Y pon EMILIANA TORRINI (por ejemplo su álbum FISHERMAN'S WOMAN) o NATALIE WALKER (album URBAN ANGEL) y escucha los vídeos (las canciones creo que no te las ponen enteras). Me parece que son artistas con una voz impresionante y muy poco conocidas; a mí me emocionan!
Creo que este tipo de música no puede aborrecerla nadie, pero claro, es mi gusto musical.
También te digo que jamás escucho música española ni en español.
Inténtalo con estas cantantes y, si quieres y te gustan, te puedo decir más.
Isi, ahora les echaré un vistazo. Acabo de ver que precisamente Emiliana Torrini, que a pesar de su nombre y apellido parece ser que no es italiana, sino islandesa, interpretó en su día la Gollum's song de la banda sonora de Las Dos Torres. Interesante sugerencia, ya te iré comentando mi parecer ;)
Lo que me ha sorprendido es la negativa absoluta a escuchar música en español. Aunque siendo cuestión de gustos, no hay más que decir :) (máxime cuando me temo que con la próxima entrada me voy a llevar más de un zarpazo de los seguidores de Larsson :D).
¡Saludos!
Yo debo confesar que no he visto ningún aparatito de esos por aquí...no conozco a nadie que posea uno (¡salvo tú! jijiji)
Soy de las que seguiría con el libro físico, incluso sin deshacerme de los que ya poseo . Pero claro, en esto influye mi edad. Ahora que regresé a estudiar a la universidad, yo tomo apuntes en un cuaderno, con pluma o lápiz y todos mis compañeros toman apuntes en su laptop.
y de las bibliotecas, tengo que ir a investigar porque tiene más de 20 años que no entro a una aquí...no se si siguen como cuando iba: jamás había libros de menos de 15 años de publicados. En la biblioteca pública a la que asistía había libros universitarios, técnicos, de literatura universal pero sólo los "clásicos"...nada de bestsellers ni de editoriales que no se consideraran académicas, pero sinceramente no se si haya cambiado.
me has dejado pensando...
Bibliobulímica, ya vamos creciendo, yo me subí al carro de los lectores electrónicos tras Elwen, y creo que conforme bajen los precios se sumarán más y más lectores. Tengo mis apreciaciones sobre estos dispositivos, que ya compartiré con vosotros en cuanto lo use un poco más, pero en mi caso tampoco dejo de lado los libros "tradicionales". Los sigo prefiriendo, sobre todo de cara a lecturas que quiera conservar por muchos años, y aunque la lectura en un eReader no cansa la vista más que leer en un libro, me sigue pareciendo más entrañable e incluso práctico leer libros, de los de toda la vida.
En cuanto a la Universidad, y otros estudios, sigo sin verlo claro de momento por las limitaciones de los dispositivos, pero de aquí a unos años, creo que pueden ser una opción muy, muy buena a tener en cuenta.
¡Saludos!
Supongo que por que menciono el e-book, hice una asociación mental entre esta entrada y la que dedico al Biblioburro (en marzo). ¡Quizás te apetezca darle una ojeada!
Ahora voy a seguir promocionándome en la entrada de esta mañana, que espero encontrar (no se de cuando era)
¡Me la anoto!
Voy a ir saliendo ya a la calle, después de un paso fugaz por la casa. Esta noche le doy una lectura y te comento, porque esa entrada en concreto aún no la leí. Gracias por el aviso de la relación con ésta :)
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